Ⅰ

Al hombre Dios perfecciona mediante la obediencia,

el disfrute de Sus palabras, y el sufrimiento de su vida.

Solo con esta fe puede cambiar y conocer a Dios de verdad.

Quien solo goza la gracia de Dios no se puede perfeccionar.

Su piedad y paciencia, obediencia y amor son superficiales.

No puede conocer a Dios,

e incluso, cuando lo hace, es un conocimiento superficial.

Esto lo lleva a decir “Dios ama al hombre y es compasivo”.

Esto no es conocimiento real de Dios.

Si no estás satisfecho con vivir en la gracia de Dios,

si anhelas y buscas la verdad con devoción,

y si buscas ser ganado por Dios,

esa es la fe que quiere Él, esa es la fe que quiere Él,

porque esto es obediencia consciente a Dios.

Ⅱ

Si las personas no le obedecen, son indecisas y caen

frente al refinamiento de Dios o Sus pruebas,

eso no es obediencia.

Ellas tienen reglas sobre la fe en Dios,

y doctrinas basadas en la Biblia.

Llenos de cosas humanas, obedecen por sus preferencias.

¿Acaso querría Dios esta obediencia?

Es autosatisfacerse y autoapaciguarse,

no es obediencia a Dios.

Si dices que lo es, ¿acaso no blasfemas?

Eres un faraón egipcio, haces el mal, te opones a Dios.

Así no es como Dios quiere que sirvas.

Arrepiéntete, obtén conciencia de ti mismo.

No molestes, recuerda tu lugar,

o se te castigará por oponerte a Dios.

Si no estás satisfecho con vivir en la gracia de Dios,

si anhelas y buscas la verdad con devoción,

y si buscas ser ganado por Dios,

esa es la fe que quiere Él, esa es la fe que quiere Él,

porque esto es obediencia consciente a Dios,

porque esto es obediencia consciente a Dios.

Adaptado de La Palabra, Vol. 1. La aparición y obra de Dios. Debes obedecer a Dios al creer en Dios