Vivir en el reposo es una vida sin guerra,

una vida sin suciedad, una vida sin injusticia,

sin más alteraciones de Satán, sin más corrupción de Satán,

donde nadie se le opone a Dios

y todo está en su lugar correcto,

para adorar al Señor de la creación,

y el cielo y la tierra están en paz.

Esto es vivir en el reposo, oh, vivir en el reposo.

Ⅰ

Cuando Dios repose, no habrá mal en la tierra

ni enemigos que la invadan,

el hombre entrará a un nuevo reino,

sin corrupción de Satanás,

la humanidad habrá sido salvada de la corrupción.

El día en que repose el hombre

será el día en que Dios repose,

que Él perdió porque la humanidad

no pudo entrar en el reposo.

Entrar en el reposo no es

el fin del movimiento ni de todo el crecimiento.

No significa que Dios ya no obra.

No significa que el hombre ya no vive.

El reposo empezará cuando Satán sea destruido

y los malvados que hicieron el mal

hayan sido castigados y eliminados,

y Dios ya no tenga enemigos.

Vivir en el reposo es una vida sin guerra,

una vida sin suciedad, una vida sin injusticia,

sin más alteraciones de Satán, sin más corrupción de Satán,

donde nadie se le opone a Dios

y todo está en su lugar correcto,

para adorar al Señor de la creación,

y el cielo y la tierra están en paz.

Esto es vivir en el reposo, oh, vivir en el reposo.

Ⅱ

Cuando Dios entre en el reposo, habrá terminado

Su obra para salvar a la humanidad.

Cuando el hombre entre en el reposo,

vivirá bajo la luz de Dios,

bendito y libre de Satán, en la tierra con normalidad.

Cuando Dios y el hombre reposen juntos,

la humanidad habrá sido salvada,

Satán habrá sido aniquilado

y la obra de Dios completada,

y el hombre ya no vivirá bajo Satán.

Dios ya no estará ocupado,

el hombre ya no irá de un lado a otro,

Dios y la humanidad entrarán juntos en el reposo.

Adaptado de La Palabra, Vol. 1. La aparición y obra de Dios. Dios y el hombre entrarán juntos en el reposo