105 Somos tan feliz viviendo ante Dios
Ⅰ
Hermanos, hermanas, disfrutad de las palabras de Dios
y vivid felices ante Dios.
Al compartir y enseñar las palabras de Dios,
nuestro conocimiento de la verdad se hace realidad.
Eliminamos las nociones religiosas
y vemos que las palabras de Dios son la verdad.
Asistimos al banquete de bodas del Cordero;
nuestros corazones sienten felicidad sin comparación.
Al recibir el juicio de Dios,
somos purificados y conocemos al Dios práctico.
Sólo seguíamos rituales y nuestra fe era tan difusa.
Ahora Cristo de los últimos días nos dice Sus palabras;
nos abastece, nos pastorea; todo es real.
Al conocer la verdad, somos liberados y vivimos ante Dios.
Ⅱ
Hermanos, hermanas, disfrutad de las palabras de Dios
y vivid felices ante Dios.
Al compartir la verdad, llegamos a entender
nuestra arrogancia, engaño y falta de humanidad.
Nos odiamos a nosotros mismos y abandonamos la carne.
Nos decidimos a complacer a Dios y a practicar la verdad.
Nos hacen honestos, con pensamientos y acciones como uno solo,
no hay maneras de Satanás, no hay falsedad.
Trabajamos en armonía juntos,
obedecemos la verdad y entramos en las palabras de Dios.
Nos amamos y ayudamos entre nosotros, actuamos con la verdad,
practicamos amar a Dios y cumplimos bien con nuestro deber.
Vivimos a semejanza humana
para dar gloria y testimonio de Él.
Ⅲ
Hermanos, hermanas, disfrutad de las palabras de Dios
y vivid felices ante Dios.
Las palabras de Dios nos guían durante el tormento y los momentos difíciles.
El cruel, gran dragón rojo es el contraste de Dios.
Al ver la omnipotencia y la sabiduría de Dios,
seguiremos siempre a Dios con fe total.
Tras haber pasado por todo tipo de pruebas y adversidades,
vemos a través de Satanás, y sentimos la hermosura de Dios.
Es el gran amor de Dios el que compartimos en
el sufrimiento de Cristo, Su reino y Su paciencia.
Cuanto más madura el pueblo de Dios,
más es abatido el gran dragón rojo.
Todas las palabras de Dios se han hecho realidad.
El reino de Cristo está en la tierra, alabaremos a Dios siempre.