283 Al fin puedo amar a Dios
Ⅰ
Tu amor es sincero y puro, tienes un corazón bondadoso y honesto, y Te hiciste carne para salvar a la humanidad.
Veo que Tu humildad y Tu ocultación son muy hermosas, percibo cuán inconmensurable eres.
Te sigo de cerca con miedo y temor; Tus palabras me reconfortan.
Me acompañas en las dificultades, y Tus palabras de juicio me purifican y salvan.
Al fin soy capaz de amarte; día y noche estoy contigo, y ahora entiendo Tu voluntad.
Al ver cada vez más y más de Tu hermosura, llego a conocerte, Dios Todopoderoso.
Estás conmigo y he ganado mucho; la sorpresa es siempre agradable.
Tú me das todo Tu amor, y qué precioso es mi tiempo junto a Ti.
Ⅱ
Tu amor me ha despertado y ha inspirado mi corazón, y deseo amarte y serte leal.
Usas Tu palabra para juzgarme y purificarme, y Tú me salvas de la influencia de Satanás.
He disfrutado tanto de Tu amor, he entendido la verdad, te he amado y venerado desde el fondo de mi corazón.
El dolor y el refinamiento me acercan más a Ti y entrego mi vida para dar un hermoso testimonio de Tu gloria.
Te he seguido hasta hoy, he obtenido la verdad y la vida y el camino se hace cada vez más luminoso.
Al contemplar Tu carácter justo y santo, he llegado a conocerte, Dios Todopoderoso.
Por Tu gracia ahora soy purificado y salvado, no sé cómo agradecértelo.
Al poner Tus palabras en práctica, ahora vivo en la luz, y debería esforzarme aún más en mi búsqueda de amarte.