162 Corre hacia la senda de la luz
Ⅰ
Mira la miseria del mundo entero,
la humanidad que Satanás ha corrompido con gran brutalidad.
Luchando a tientas en dolor y oscuridad,
¿cómo podrá la humanidad la senda de luz encontrar?
Dios Todopoderoso, Sus verdades ha expresado,
he oído Su voz y a Él he regresado.
Cristo de los últimos días ha aparecido, soy testigo,
mas me oprime el Gobierno chino.
Cristo de los últimos días ha aparecido,
trae luz y verdad a la humanidad.
Aunque me cueste la vida misma, elijo la justicia, la justicia.
Corro hacia la senda de la luz porque Cristo es el camino,
es la verdad y también es la vida.
Ⅱ
Oro en las noches oscuras y las palabras de Dios me dan fuerza y fe.
Por salvar a la humanidad Dios soporta humillación
y sufrir con Cristo es un gran honor.
Tengo la bendición de oír las declaraciones de Dios.
¡Qué triste es creer en Él sin obtener la verdad!
Aunque viniese cualquier peligro o dificultad,
dejo todo y sigo a Cristo hasta el final.
Cristo de los últimos días ha aparecido,
trae luz y verdad a la humanidad.
Aunque me cueste la vida misma, elijo la justicia, la justicia.
Corro hacia la senda de la luz porque Cristo es el camino,
es la verdad y también es la vida.
Ⅲ
Me debatí entre la vida y la muerte,
con las torturas de esa cárcel china.
Consuelo y fuerza me dieron las palabras de Dios,
y lloraba a mares al sentir Su amor.
La protección de Dios no tuvo fin,
la autoridad y el poder de Sus palabras conocí.
Sufrí tanto en aquella prisión, pero me acerqué, me acerqué a Dios.
Con la persecución he visto al final el rostro satánico del Partido Comunista Chino.
El diablo está en el poder, miente y engaña,
y tienta al pueblo con depravación.
Cristo de los últimos días ha aparecido,
trae luz y verdad a la humanidad.
Aunque me cueste la vida misma, elijo la justicia, la justicia.
Corro hacia la senda de la luz porque Cristo es el camino,
es la verdad y también es la vida, la vida, y también es la vida.