274 El hombre debe adorar a Dios si quiere tener un buen destino
I
Dios creó este mundo, creó a esta humanidad
y, además, fue el arquitecto
de la antigua cultura griega y la civilización humana.
Solo Dios consuela a esta humanidad y solo Él cuida de ella noche y día.
Solo Dios consuela a esta humanidad y solo Él cuida de ella noche y día.
El desarrollo y el progreso humanos son inseparables de la soberanía de Dios,
y la historia y el futuro de la humanidad
son inextricables de los arreglos de Dios.
II
Si eres un cristiano verdadero, creerás sin duda
que el auge y la caída de cualquier país o nación
ocurren de acuerdo con los arreglos de Dios.
Solo Él conoce el destino de un país o nación,
y solo Él controla el curso de esta humanidad.
Solo Él conoce el destino de un país o nación,
y solo Él controla el curso de esta humanidad.
Si esta desea tener un buen destino, si un país desea un buen destino,
entonces el hombre debe postrarse ante Dios y adorarlo,
arrepentirse y confesarse ante Él,
si no, la suerte y el destino del hombre serán una catástrofe inevitable,
si no, la suerte y el destino del hombre serán una catástrofe inevitable.
Entonces el hombre debe postrarse ante Dios y adorarlo,
arrepentirse y confesarse ante Él,
si no, la suerte y el destino del hombre serán una catástrofe inevitable.
de La Palabra, Vol. I. La aparición y obra de Dios. Apéndice II: Dios preside el destino de toda la humanidad