1092 Dios ha estado esperando la entrada de la humanidad en la senda correcta durante largo tiempo
I
Sin importar lo que Dios haga ni qué esfuerzo, precio o pensamiento dedique a las personas, no tiene más que un propósito último: Él espera que la gente se dirija a la senda correcta y la siga. La senda correcta es perseguir la verdad y estar mejor dotado de ella. Si la senda por la que camina la gente es conforme con las palabras de Dios y tiene la verdad por criterio, el precio que Dios invierte en las personas y todas las expectativas que tiene puestas en ellas serán correspondidos. Dios no le formula altas exigencias a la gente, y tiene paciencia y amor suficientes para esperar a que la gente regrese.
II
Cuando vuelvas a Dios, Él no te otorgará simplemente algo de gracia y bendiciones, sino que te proveerá, apoyará y guiará en la verdad, en la vida y en la senda que sigas. Dios llevará a cabo una obra aún mayor en ti. Eso es lo que anhela. Antes de dicha obra, Dios guía incansablemente a las personas, las apoya y les otorga gracia y bendiciones. Lo que Dios quiere en última instancia, tras hacer toda esta obra, es ver que la gente pueda dar marcha atrás. Si las personas comprenden Sus intenciones, Su mentalidad y por qué quiere hacer eso realmente, reconocerán Su belleza, tendrán cierta estatura y habrán madurado.
III
Cuando empiezan a ser meticulosas, a esforzarse en cada verdad que Dios les ha proveído y empiezan a entrar en la realidad de cada verdad, Dios se complace. Entonces ya no tiene que llevar a cabo la sencilla obra de estar con las personas y reconfortarlas, advertirles y exhortarlas, sino que puede proveerlas más en cuanto a la verdad, en la vida y en la senda por la que caminan. Dios es capaz de realizar una obra mayor y más concreta en ellas. Al realizar esa obra, Dios ve esperanza en las personas, ve su futuro y que la gente es del mismo sentir que Él. Esto es inmensamente maravilloso, tanto para las personas como para Dios, y algo que Él lleva anhelando mucho tiempo.
IV
Cuando una persona toma la senda de la búsqueda de la verdad, poco a poco va adquiriendo más fortaleza y estatura real con las que luchar contra Satanás y mantenerse firme en su testimonio de Dios, y Dios tendrá más esperanza de ver a un ser humano creado más ponerse en pie y luchar por Él contra Satanás. Esa es la gloria de Dios. El hecho de que las personas crezcan en estatura, que se vayan haciendo más fuertes, que den un testimonio cada vez mayor y que vayan aumentando su temor y sumisión a Dios significa que hay esperanza de que Dios gane un grupo de vencedores y sea glorificado por las personas y también entre estas. Eso es lo que Dios anhela y Su esperanza y expectativa respecto a vosotros. Lleva mucho tiempo aguardándolo.
de La Palabra, Vol. VI. Sobre la búsqueda de la verdad 1. Cómo perseguir la verdad (15)