Capítulo 88

Las personas simplemente no pueden imaginar el grado en el que Mi paso se ha acelerado: esto es una maravilla que ha ocurrido y que es insondable para el hombre. Mi paso ha continuado desde la creación del mundo, y Mi obra nunca se ha detenido. Todo el mundo-universo cambia de día en día, y las personas también están cambiando constantemente. Todo esto es parte de Mi obra, parte de Mi plan y, aún más, pertenecen a Mi gestión; y ningún humano conoce o entiende estas cosas. Solo cuando Yo mismo os lo digo, solo cuando Yo me comunico con vosotros cara a cara, sabéis lo más mínimo; de lo contrario, absolutamente nadie puede tener ni idea del proyecto para Mi plan de gestión. Tal es Mi gran poder y, aún más, tales son Mis maravillosas acciones. Estas son cosas que nadie puede cambiar. Por lo tanto, lo que Yo digo hoy se hace, y esto simplemente no puede cambiar. Las nociones humanas no contienen ni el menor rastro de conocimiento de Mí, ¡todas son parloteo ridículo! ¡No penséis que habéis tenido suficiente o que estáis satisfechos! Te digo esto: ¡aún tienes mucho camino que recorrer! De todo Mi plan de gestión solo conocéis un poco, así que debéis escuchar lo que digo y hacer lo que sea que Yo os diga que hagáis. Actuad de acuerdo con Mis deseos en todo, y con toda seguridad tendréis Mis bendiciones; cualquiera que crea podrá recibir, mientras que, en aquellos que no crean, se cumplirá esa “nada” que imaginaban. Esta es Mi justicia y, aún más, es Mi majestad, Mi ira y Mi castigo. No dejaré que nadie se libre ni siquiera con un solo pensamiento o acción.

Al escuchar Mis palabras, la mayoría de las personas temen y tiemblan con el ceño fruncido de preocupación. ¿Te he acusado injustamente en realidad? ¿Podría ser que no eres un hijo del gran dragón rojo? ¡Incluso finges ser bueno! ¡Incluso finges ser Mi hijo primogénito! ¿Crees que estoy ciego? ¿Crees que no puedo distinguir a las personas? Yo soy el Dios que escudriña lo más íntimo del corazón de las personas: esto es lo que les digo a Mis hijos y lo que también os digo a vosotros, los hijos del gran dragón rojo. Veo todo claramente, sin cometer el más mínimo error. ¿Cómo podría no saber lo que hago? ¡Tengo claro como el agua lo que hago! ¿Por qué digo que Yo soy Dios mismo, el Creador del universo y de todas las cosas? ¿Por qué digo que soy el Dios que examina lo más íntimo del corazón de las personas? Soy muy consciente de la situación de cada persona. ¿Creéis que no sé qué hacer o qué decir? Esto no es asunto vuestro. Tened cuidado de no ser asesinados por Mi mano; sufriríais una pérdida de esta manera. Mis decretos administrativos son implacables. ¿Entendéis? Todo lo anterior es parte de Mis decretos administrativos. Desde el día en que os los digo, si cometéis más transgresiones, habrá retribución, porque previamente no entendisteis.

Ahora promulgo Mis decretos administrativos para vosotros (efectivos a partir del día de su promulgación, asignan diferentes castigos a diferentes personas):

Yo cumplo Mis promesas, y todo está en Mis manos, cualquiera que dude recibirá la muerte de seguro. No hay lugar para ninguna consideración; serán exterminados de inmediato, y así se eliminará el odio de Mi corazón. (De ahora en adelante se confirma que cualquiera que reciba la muerte no debe ser miembro de Mi reino, sino que debe ser descendiente de Satanás).

Como hijos primogénitos, debéis mantener vuestras propias posiciones, cumplir bien con vuestros propios deberes y no ser entrometidos. Os debéis ofrecer para Mi plan de gestión, y dondequiera que vayáis, debéis dar buen testimonio de Mí y glorificar Mi nombre. No cometáis actos vergonzosos, sino sed ejemplos para todos Mis hijos y Mi pueblo. No seáis libertinos ni siquiera por un momento: siempre debéis aparecer ante todo el mundo llevando la identidad de hijos primogénitos, y no seáis serviles; debéis caminar hacia delante con la cabeza en alto. Os estoy pidiendo que glorifiquéis Mi nombre, no que lo deshonréis. Aquellos que son hijos primogénitos, cada uno tiene su propia función individual y no puede hacerlo todo. Esta es la responsabilidad que os he dado, y no debe ser eludida. Debéis dedicaros con todo vuestro corazón, con toda vuestra mente y con toda vuestra fuerza a cumplir lo que os he confiado.

A partir de hoy, en todo el mundo-universo, la tarea de pastorear a todos Mis hijos y a todo Mi pueblo se confiará a Mis hijos primogénitos para que la cumplan, y castigaré a cualquiera que no pueda dedicar todo su corazón y mente a cumplirla. Esta es Mi justicia, no perdonaré ni seré indulgente, ni siquiera con Mis hijos primogénitos.

Si hay alguien entre Mis hijos o entre Mi pueblo que ridiculice e insulte a uno de Mis hijos primogénitos, lo castigaré severamente, porque Mis hijos primogénitos me representan; lo que alguien les haga a ellos, también me lo hace a Mí. Este es el más severo de Mis decretos administrativos. Permitiré que Mis hijos primogénitos administren Mi justicia de acuerdo con sus deseos, en contra de cualquiera de Mis hijos y Mi pueblo que viole este decreto.

Poco a poco, abandonaré a cualquiera que me considere de modo frívolo y que se enfoque solo en Mi comida, vestido y sueño; que solo se ocupe de Mis asuntos externos y que no tenga ninguna consideración por Mi carga, y que no preste atención a cumplir sus propias funciones apropiadamente. Esto va dirigido a todos los que tienen oídos.

Cualquiera que termine de rendirme servicio debe retirarse con obediencia, sin escándalo. Ten cuidado, o de lo contrario me encargaré de ti. (Esto es un decreto suplementario).

Mis hijos primogénitos levantarán la vara de hierro de ahora en adelante y comenzarán a ejecutar Mi autoridad para gobernar a todas las naciones y pueblos, para caminar entre todas las naciones y pueblos y para llevar a cabo Mi juicio, justicia y majestad entre todas las naciones y pueblos. Mis hijos y Mi pueblo me temerán, me alabarán, me aclamarán y me glorificarán sin cesar, porque Mi plan de gestión se cumplió y Mis hijos primogénitos pueden reinar conmigo.

Esto es una parte de Mis decretos administrativos; después de esto, os los diré a medida que progresa la obra. De los decretos administrativos anteriores, veréis el ritmo al que hago Mi obra, así como qué paso ha alcanzado Mi obra. Esta será la confirmación.

Ya he juzgado a Satanás. Porque Mi voluntad no tiene impedimentos, y porque Mis hijos primogénitos han recibido gloria conmigo, ya he ejercido Mi justicia y majestad hacia el mundo y hacia todas las cosas que pertenecen a Satanás. No muevo un dedo ni presto atención a Satanás en absoluto (porque él no merece ni conversar conmigo). Solo sigo haciendo lo que quiero hacer. Mi obra se desarrolla sin problemas, paso a paso, y Mi voluntad no tiene impedimentos en la tierra entera. Hasta cierto punto, esto ha avergonzado a Satanás, que ha sido completamente destruido; pero esto en sí no ha cumplido Mi voluntad. También les permito a Mis hijos primogénitos llevar a cabo Mis decretos administrativos sobre ellos. Por un lado, lo que le permito ver a Satanás es Mi ira hacia él; por el otro, le permito ver Mi gloria (ver que Mis hijos primogénitos son los testigos más resonantes de la humillación de Satanás). No lo castigo en persona, sino que dejo que Mis hijos primogénitos lleven a cabo Mi justicia y majestad. Debido a que Satanás solía abusar de Mis hijos, perseguir a Mis hijos y oprimir a Mis hijos, hoy, después de que su servicio ha terminado, les permitiré a Mis maduros hijos primogénitos encargarse de ello. Satanás ha sido impotente contra la caída. La parálisis de todas las naciones en el mundo es el mejor testimonio, las personas en lucha y los países en guerra son las manifestaciones aparentes del colapso del reino de Satanás. La razón por la que no mostré ninguna señal ni maravilla en el pasado fue para traer humillación a Satanás y glorificar Mi nombre, paso a paso. Cuando Satanás sea completamente liquidado, Yo comenzaré a mostrar Mi poder: lo que digo se hace realidad y las cosas sobrenaturales que no estén en conformidad con los conceptos humanos se cumplirán (estas se refieren a las bendiciones que están por venir pronto). Porque Yo soy el Dios práctico mismo y no tengo reglas, y porque hablo de acuerdo con los cambios en Mi plan de gestión, lo que he dicho en el pasado no es entonces necesariamente aplicable en el presente. ¡No te aferres a tus propias nociones! No soy un Dios que acate reglas; conmigo todo es libre, trascendente y completamente liberado. Tal vez lo que se dijo ayer sea obsoleto hoy, o quizás pueda ser descartado hoy (sin embargo, desde que Mis decretos administrativos son promulgados, nunca cambiarán). Estos son los pasos de Mi plan de gestión. No os aferréis a reglamentaciones. Cada día hay nueva luz y hay nuevas revelaciones, y ese es Mi plan. Cada día, Mi luz se revelará en ti y Mi voz se liberará al mundo-universo. ¿Entiendes? Esta es tu obligación, la responsabilidad que te he confiado. No la debes descuidar ni por un momento. Usaré hasta el final las personas a las que apruebo, y esto nunca cambiará. Porque Yo soy el Dios todopoderoso, sé qué clase de persona debe hacer qué cosa, así como qué clase de persona es capaz de hacer qué cosa. Esta es Mi omnipotencia.

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