Ⅰ

La mayor bendición de la fe es haber dado la bienvenida al Señor.

Al ganar la provisión y el riego de las palabras de Dios Todopoderoso,

crecemos felices en la vida en la iglesia.

Al comer y beber las palabras de Dios, entendemos la verdad

y vivimos una semejanza humana.

Las palabras de Dios nos muestran la dirección que deben tomar nuestras vidas.

He disfrutado del amor de Dios.

Valoraré este tiempo maravilloso y buscaré ganar la verdad,

cumplir mi deber bien y ganar la aprobación de Dios.

Ⅱ

La mayor bendición de la fe es entender muchas verdades.

Contemplamos la justicia de Dios al experimentar el juicio de Sus palabras.

Nos sometemos a la reprensión y la disciplina de Dios cuando somos rebeldes.

Al transformar nuestro carácter, experimentamos el gran amor de Dios.

Se purifica nuestra corrupción y tenemos un corazón temeroso de Dios.

He disfrutado del amor de Dios.

Estoy decidido a practicar la verdad,

vivir la semejanza de una persona honesta,

ser capaz de someterme a Dios y dar testimonio de Él.

Ⅲ

La mayor bendición de la fe

es difundir el evangelio y dar testimonio de Dios.

Al experimentar la persecución y las adversidades,

calamos la fealdad de Satanás,

nos rebelamos por completo contra el gran dragón rojo

y damos testimonio de Dios.

Seremos leales hasta la muerte

y daremos testimonio de la santidad y la justicia de Dios.

Es un honor para mí dar testimonio de Dios.

He disfrutado del amor de Dios,

así que debo ser leal

y difundir el evangelio del reino de Dios a lo largo y ancho,

y cumplir mi deber bien para retribuir el amor de Dios.

de Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos