Pregunta 2: Dices que las palabras del hermano Pablo no son verdad. Entonces, ¿por qué están sus palabras en la Biblia? Las palabras de Pablo están escritas en la Biblia. Por lo tanto, fueron inspiradas por Dios; representan las palabras de Dios. ¡Deberíamos buscar en ellas!
Respuesta: Aunque las palabras de Pablo están escritas en la Biblia, eso no significa que sean palabras de Dios. Es así porque la Biblia fue recopilada por el hombre, no por Jehová Dios, no fue recopilada por el Señor Jesús y desde luego no fue recopilada por el Espíritu Santo. ¿Puede algo recopilado por el hombre no contener errores? Las palabras de Jehová en la Biblia, las palabras con las que Jehová instruyó a los profetas y las palabras del Señor Jesús, esas son las palabras de Dios. Dios nunca dio testimonio de que las palabras de los apóstoles representaran Sus palabras, ni nunca dio testimonio de que las palabras de los apóstoles estuvieran inspiradas por Él. “Toda Escritura es inspirada por Dios”. El Espíritu Santo nunca dio testimonio de ello, ni tampoco el Señor Jesús. Sólo Pablo dijo eso. Entonces, ¡sus palabras no tienen peso! En la época de los apóstoles, cuando sus cartas eran distribuidas a las iglesias, la gente sólo decía que esas eran las palabras del hermano Pablo o del hermano Pedro. Todos sabían que las cartas de los apóstoles eran palabras del hombre. Nadie trató esas cartas como palabras de Dios. ¡Es un hecho histórico que nadie puede negar! En la Era de la Gracia, sólo el Señor Jesús era el Dios encarnado. Sólo el Señor Jesús expresó las palabras de Dios. Los apóstoles eran meramente personas usadas por el Señor, sus palabras son las palabras de los hombres y sólo representan sus interpretaciones y experiencias personales de las palabras de Dios. Aunque sus palabras contuvieran el esclarecimiento del Espíritu Santo, no podrías decir que son las palabras de Dios. Ni Pablo mismo se atrevió a decir que sus palabras eran las palabras de Dios o estaban inspiradas por Él. No se atrevió a decir que hablaba en nombre del Señor Jesús. Por tanto, si decimos que las palabras de Pablo son las palabras de Dios y las seguimos y buscamos como si fueran un requisito de Dios, sólo porque están escritas en la Biblia, estamos cometiendo un error.
¿por qué la gente exalta y pone una fe tan ciega en la Biblia? Porque no saben que la Biblia fue recopilada por los hombres y no se originó por la voluntad de Dios. Entonces, la gente pone una fe ciega y reverencia a la Biblia, aseguran que todas las palabras de la Biblia son las palabras de Dios. Esto es una traición de los hechos históricos. Viene causada por la ignorancia del hombre. Leamos un pasaje de las palabras de Dios Todopoderoso: “Las epístolas paulinas del Nuevo Testamento son epístolas que Pablo escribió para las iglesias y no son inspiraciones del Espíritu Santo ni Sus declaraciones directas. Son simplemente palabras de exhortación, consuelo y aliento que escribió para las iglesias durante el transcurso de su obra. Así, también, son un registro de gran parte de la obra de Pablo en esa época. […] Todo lo que dijo que era edificante y positivo para las personas fue correcto, pero no representaba las declaraciones del Espíritu Santo ni podía representar a Dios. ¡Es un entendimiento atroz y una blasfemia enorme que las personas traten los registros de las experiencias de un hombre y las epístolas de un hombre como las palabras habladas por el Espíritu Santo a las iglesias! […] Su identidad fue simplemente la de un apóstol obrero, y fue simplemente un apóstol enviado por Dios; no fue un profeta ni un adivino. Para él, su propia obra y la vida de los hermanos y hermanas eran de la mayor importancia. Por tanto, no podía hablar en nombre del Espíritu Santo. Sus palabras no eran las palabras del Espíritu Santo, y mucho menos podría decirse que fueran las de Dios, porque Pablo no era nada más que una criatura de Dios y, ciertamente, no era Su encarnación. Su identidad no era la misma que la de Jesús. Las palabras de Jesús fueron las palabras del Espíritu Santo; fueron las palabras de Dios, porque Su identidad era la de Cristo, el Hijo de Dios. ¿Cómo podía ser Pablo Su igual? Si las personas consideran las epístolas o las palabras como las de Pablo como declaraciones del Espíritu Santo, y las adoran como a Dios, sólo puede decirse que no discriminan correctamente. Dicho con mayor severidad, ¿no es esto simplemente blasfemia? ¿Cómo podría un hombre hablar en nombre de Dios? ¿Y cómo podrían las personas postrarse ante los registros de sus epístolas y ante las palabras que habló como si fueran un libro sagrado o un libro celestial? ¿Podría el hombre pronunciar a la ligera las palabras de Dios? ¿Cómo podría un hombre hablar en nombre de Dios?” (La Palabra, Vol. I. La aparición y obra de Dios. Relativo a la Biblia (3)). Hermanos y hermanas, ahora creo que podemos saber la diferencia entre las palabras de Dios y las palabras del hombre, ¿verdad? Antes, poníamos demasiada fe ciega en la Biblia y la reverenciábamos demasiado. Pensábamos que la Biblia estaba inspirada por Dios y contenía las palabras de Dios. Pensábamos que la Biblia fue recopilada por Dios. ¡Eso era un gran error! Las personas sin la verdad son propensas a ser engañadas. Ni siquiera pueden distinguir entre las palabras de Dios y las palabras de los hombres. Tratan las palabras de los hombres como si fueran palabras de Dios. ¡Esto es el colmo de la estupidez! Pablo no es más que uno de los apóstoles enviados por Dios, no es el Dios encarnado. Nunca puede expresar las palabras de Dios. Si hacemos que las palabras de Pablo estén a la par de las palabras de Dios, ¡estamos ofendiendo gravemente el carácter de Dios!
Extracto del guion de la película de “Recuerdos que escuecen”