Ⅰ

Sigo al Dios verdadero y Sus palabras me guían.

Las verdades que Dios expresa son cada vez más abundantes.

Al comer, beber y disfrutar de Sus palabras, mi corazón se ilumina.

¡Doy gracias a Dios Todopoderoso por haberme elegido y salvado!

Sigo al Dios verdadero y Sus palabras me guían.

La obra del Espíritu Santo apresura el paso

y Dios organiza situaciones para formarnos.

Sosegarnos ante Dios y buscar la verdad nos trae beneficios.

Seguimos a Dios y nuestra senda se ilumina cada vez más.

¿Cómo puede uno alcanzar la salvación si pone la mano en el arado y luego mira atrás?

Seguimos a Dios para ganar la verdad;

proclamarlo y dar testimonio de Él es nuestro deber obligatorio.

Seguimos a Dios y nuestra senda se ilumina cada vez más.

¿Cómo puede uno alcanzar la salvación si pone la mano en el arado y luego mira atrás?

Seguimos a Dios para ganar la verdad;

proclamarlo y dar testimonio de Él es nuestro deber obligatorio.

Ⅱ

Sigo al Dios verdadero y Sus palabras me guían.

Ahora es cuando Dios nos pone a prueba

y las fuerzas de Satanás dan sus últimos estertores.

Dependemos de Dios y nunca nos acobardamos ni nos doblegamos.

Sigo al Dios verdadero y Sus palabras me guían.

La obra de Dios ya está en su hora final;

se deben cumplir los deberes bien y acatar las intenciones de Dios.

Debemos dedicar todo nuestro ser a Dios y entregarnos

para dar testimonio de Él.

Seguimos a Dios y nuestra senda se ilumina cada vez más.

Comprender la verdad trae la fe verdadera.

Seguimos a Dios y nuestra senda se ilumina cada vez más.

Vivimos ante Dios y lo alabamos por siempre.

Seguimos a Dios y nuestra senda se ilumina cada vez más.

Comprender la verdad trae la fe verdadera.

Seguimos a Dios y nuestra senda se ilumina cada vez más.

Vivimos ante Dios y lo alabamos por siempre.

de Seguir al Cordero y cantar nuevos cánticos